En este momento estás viendo Con el calor también me aburro

Con el calor también me aburro

Muchos perros se aburren en chalet, este mestizo de Golden es buen ejemplo.
Una amiga y cliente de torrente me aviso de que su tío tenía un perro en su chalet que hacia cosas raras.
Cuando hable con ellos no me parecieron tan raras, si no al contrario, me parecieron incluso normales. Al no tener ningún trabajo, este chico se había metido a jardinero y decorador del chalet. Tiene un pequeño “cementerio” debajo de la casa, donde se va llevando todo lo que pilla para romperlo a la sombra. La verdad es que su dueño algo mayor comprendía que si el perro no tenía nada que hacer era normal que hiciera esas cosas.
Practicamos ejercicios para que el dueño pudiera controlarlo, puesto que creo que el perro nunca había estado con correa y le ensañamos el oficio que tiene por naturaleza, jugar a cazar. Practicamos y vimos como el perro se quedaba satisfecho y empezó a utilizar la sombra para descansar, no para destruir. En una sesión pudimos solucionar los problemas de este chico y salvamos el chalet de la catástrofe que es tener a un perro aburrido, frustrado y alterado continuamente.