Yaco es un dálmata de Cehejín, Murcia. Contactaron conmigo por un problema de agresividad hacia otros perros y personas. No es el primer dálmata que tiene este problema.
Cuando entre en casa sin previo aviso me atacó y no era la primera vez que lo hacía. Cuando algún amigo entraba en casa podía atacar.
 Era como una “conexión” rapidísima y sin previo aviso. Muchos dálmatas tienen esta cualidad. Hay algunos muy tranquilos y que canalizando el juego o con adiestramiento es suficiente, pero hay otros muuuuy activos y que también tiene reacciones instantáneas. Pero encima Yaco eran como cuatro dálmatas en uno. Tiene un cuerpo impresionante, grande, musculado y reflejos que iban como el rayo.
El problema es que un perro con estas cualidades si se equivoca de oficio y se hace guardián, puede ser muy imprevisible.
Su dueño es excepcional, muy dedicado a él, le gusta su perro y se nota. Pero hay que diferenciar entre gastar su energía y que sienta útil. Daban largos paseos, jugaban muy a menudo, pero hay que entender que no se trata de la cantidad, sino de la calidad de lo que hacemos.
Fue fundamental para su rehabilitación canalizar toda su actividad. Acompañado de una buena comunicación se puedo cambiar el oficio de guardián, junto con  la inseguridad y stress que eso puede generar en un perro, a un perro listo para trabajar. Un perro que por sus cualidades se haría campeón en lo que quisiera.